sábado, 9 de agosto de 2014

El día en que Adrián Ramos y Jersson González callaron a la hinchada de Santa Fé

¿Qué imagen se le viene a la cabeza cuando escucha hablar de Jersson González y Adrián Ramos?






En mi caso se me vienen a la imagen cientos de jugadas, muchos goles, celebraciones, victorias y derrotas. Pero hay algo que se me viene a la mente y probablemente usted no recuerda, un gesto, un Adrián Ramos joven y un Jersson González con experiencia, ambos bastante frustrados con el desarrollo del partido, en los primeros 45' del juego América poco había tenido el balón, se había acercado unas 4 veces al arco del rival, igualmente que los 'cardenales' llegaron 4 o 5 veces al arco del entonces portero Adrián Berbia.

Quizá estábamos viendo a un América resignado a quedar eliminado en la primera ronda de la Copa Cafam 2008, debutando en el año con una derrota por un gol en posición adelantada de Leider Preciado al minuto 42 del primer tiempo. Jugadores frustrados y resignados veían como el tiempo de aquel partido quedaba para el recuerdo y como cada una de sus acciones era evitada bien sea por un jugador de Santa Fé o por la mala fortuna de un disparo desviado o tirado al poste.
Quizá, también estábamos viendo a un Adrián Ramos frustrado por las críticas del principiante, jugando frente a su antigüo club, escuchando rechiflas, cánticos e insultos.
Corría el minuto 88 cuando de lo más mágico de los pies de Jersson González brotó un centro y Adrián Ramos con su instinto goleador sacó un cabezazo que ni el mismo dios en sus tiempos de portero pudo evitar. Dos minutos antes del pitazo final, América llevaba el compromiso a los penales.

Para compensar ese centro mágico que puso, Jersson González abrió la tanda de penales para América, pensando en su club, en América, en cali, en la hinchada, en la pasión, en los cánticos, las chiflas, los buenos momentos, los amargos, los envidiosos, los optimistas, los escarlatas, Jersson González con un doble gesto calló y le dio una bendición a la barra brava de Santa Fé, diciendo ''En Bogotá, manda América''.

Finalmente América logra eliminar a Santa Fé derrotándolo 4x3 en penales, posteriormente se coronaría campeón de éste torneo venciendo 1x0 a Millonarios en la final.

Ahora no solo recordaremos a Gustavo Adrián Ramos como uno de los mejores jugadores que ha pasado por el país, ni a Jersson González como uno de los mejores cobradores de Latinoamérica, los recordaremos como aquellos que con el escudo tatuado de América en el corazón, con el liderato de un guerrero enfrentaron y desafiaron a toda una hinchada, la de Santa Fé.

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Aquí le dejamos el resumen del partido donde podrá ver claramente los gestos, también podrá deleitarse con el cobro de penal de Adrián Ramos:




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